miércoles, 12 de noviembre de 2008

Técnicas Respiratorias Antiestrés


Antecedentes

Muchos de los músicos que tocan instrumentos de viento intentan emplear la técnica de respiración del trompetista Louis Armstrong. Armstrong tocaba la trompeta sin pararse para respirar. En cambio, respiraba continuamente por la nariz y exhalaba por la boca mientras tocaba la trompeta.

Hoy en día, el saxofonista Kenny G. emplea este método para sostener las notas durante un tiempo asombrosamente largo. Incluso los cantantes se concentran en su respiración para que no se note cuando toman aire mientras cantan.

Los atletas siempre están en la regulación de la respiración. Los corredores intentan establecer un ritmo para reducir la sensación de estar sin aire. Los nadadores practican las técnicas de respiración para aumentar su capacidad pulmonar mientras bucean o nadan con la cabeza debajo del agua.

Muchas comadronas enseñan a sus pacientes a respirar despacio y tranquilamente mientras están dando a luz. La respiración pausada no sólo reduce el estrés físico, sino que ayuda a la futura madre a concentrarse en una determinada actividad en lugar de centrarse en el dolor o los nervios.

Los atletas, los músicos e incluso los empresarios no estudian las técnicas de respiración únicamente para mejorar su resistencia y rendimiento. Ellos saben que una respiración profunda y pausada antes de iniciar cualquier actividad es una manera sencilla de rebajar el estrés.

Técnicas de respiración

A continuación ter mostraré algunas técnicas para mejorar tu respiración.

Echemos un vistazo a un bebé sano mientras duerme y veras cómo su barriguita se eleva y desciende rítmicamente. Esto se debe a que los bebés todavía no han aprendido a respirar incorrectamente. Esta respiración diafragmática, que emplea el diafragma para respirar y no el pecho o los hombros, es una de las técnicas respiratorias básicas que nos ayudará a mejorar nuestra respiración y a reducir el nivel de estrés.

El diafragma es un músculo situado en la base de la caja torácica, que al expandirse y contraerse, genera un efecto de vacío, empleando la fuerza abdominal para llevar aire a los pulmones.

Aunque respires con el pecho, si tomas más aire cada vez que inhalas, notarás los efectos de inmediato. Con el tiempo, puedes conseguir estabilizar el PH de la sangre. Notarás cómo respiras con más lentitud.

De pie y respirando

Esta es la primera y más sencilla de las técnicas que sirve para saber si nuestra respiración es diafragmática. Consiste en ponerse de pie y colocar una mano sobre el pecho y otra sobre el estómago. Durante un minuto, respire con normalidad. Al inhalar, observe sus manos, ¿cuál de ellas se mueve? Si es la mano que está sobre el estómago, está haciendo una respiración diafragmática. Si es la mano que está sobre el pecho, la respiración es pectoral o superficial, que es menos eficaz y no produce los beneficios de una respiración más profunda.

Advertencia: después de haber realizado un ejercicio intenso, es normal respirar con el pecho y el torso superior, combinados con el abdomen, para conseguir llenar antes los pulmones de oxígeno. Esto es lógico. Sin embargo, cuando se respira a un ritmo normal lo mejor es una respiración profunda y diafragmática.

No hay comentarios: